viernes, diciembre 13, 2019

Nación plurinacional


He pasado un fin de semana chungo, en la cama, con las tripas en guerrilla y con 39, de los cuales, 38 eran grados y el 39º era mi nieto, con mocos hasta en las orejas y con 39,5, todos de verdad. Hemos dormido mucho y comido poco; total, que lunes y martes los he pasado medio atontado. El lunes espatarrado en un sillón y el martes intentando leer. Como no me concentraba he acabado en la prensa.
Sin querer, he tropezado con Miquel Iceta y su entrevista que publica La Razón. “En España hay 8 naciones, las he contado”. Más adelante, la entrevista muestra que realmente dijo que son 8 o 9.
- Las he contado. Según los Estatutos de Autonomía, ocho, y si sumamos el preámbulo de Navarra, nueve. Los Estatutos de Galicia, Aragón, Valencia, Baleares, Canarias, Andalucía, País Vasco y Cataluña dicen que son nacionalidades, o nacionalidades históricas. Nación y nacionalidad son sinónimos.
No puedo entender que tamaña imbecilidad pueda caber en un solo cuerpo. Y no me refiero al de Iceta, el imbécil soy yo que llevo 70 viviendo en el extranjero y no me había dado cuenta hasta hoy. Y eso que me lo han ido poniendo a huevo.
. Cuando era pequeño, aprendí que en España convivíamos dos naciones: gitanos y castellanos, independientemente de nuestro lugar de nacimiento.
. Tiempo después aprendí que había más diferencias. Una señora, pariente de mi patrona, me preguntó:
- ¿Usted es castellano, oi?
- No.
- ¡Ah, es del país!
- No
Se me quedó mirando perpleja.
- No, no soy del país, soy serrano.
Creo que no pilló el chiste, pero se rio. Desde entonces fui “aquell noi tan simpàtic de la Josefina

Vienen las anécdotas a cuento porque, con mucho esfuerzo, puedo llegar a entender que no se reconozca la nacionalidad de Asturias, León o Granada, pero por más vueltas que le doy soy incapaz de asimilar que la “realidad histórica” que ha hecho que España sea admirada, temida, odiada y ocupe un lugar preeminente en la historia del mundo, Castilla, sea una mera región. Y eso que, como cuento en mis anecdotillas, a los españoles se nos confunda muchas veces con castellanos. Claro que también es raro que la NACIÓN de naciones tampoco aparezca en la lista de naciones.